Texto e Imágenes: Jaume Garcia Castro.
Tamarite de Litera, 9 de noviembre de 2013.- El Pabellón Municipal de Tamarite fue ayer el escenario donde se desarrollaron las actividades que la Asociación Interpeñas Tamarite había programado para presentarse en sociedad. Durante toda la tarde y noche se fueron desarrollando diferentes actividades que, y ese es uno de los grandes aciertos de la asociación, implicaron a personas de todas las edades.
A las 17:00h. empezó todo con una chocolatada popular. El vicepresidente de la asociación, el pastelero José Luis Florences, fue el encargado de preparar unos treinta litros de delicioso chocolate que iban acompañados de porciones de las cuarenta cocas cedidas por todas las panaderías de Tamarite. Esta ha sido la forma en la que los artesanos del pan han contribuido al nacimiento de esta nueva asociación. No son los únicos, muchos comercios e industrias tamaritanas han puesto su granito para el desarrollo de esta fiesta, así como el Ayuntamiento, que ha ayudado en todo lo posible, cediendo espacios, ofreciendo asesoramiento… La importancia del tejido asociativo se ha hecho más patente que nunca.
Después del chocolate, juegos infantiles con la supervisión de unas socias de la asociación y bajo la atenta mirada de los padres de los pequeños. Cuando todo estuvo preparado, llegó la hora de una actuación para los más pequeños con un payaso muy particular. Su nombre es Glop y mezcla la animación infantil y la globoflexia con la magia. Los niños y niñas estaban encantados con su actuación y su destreza con los trucos de magia, así como algunas madres y padres. Lo cierto es que algunos de sus trucos sorprendieron, y eso no es fácil en Tamarite, acostumbrados a la magia desde hace muchos años.
Luego un pequeño descanso y hacia las 22:00h. cena con carne a la brasa, DJ’s, música en directo, baile… Una fiesta de presentación en la que la joven asociación hizo lo que prometía desde un principio, intentar llegar a toda la población tamaritana, desde los más jóvenes hasta los de la edad que quieran. Y además gratis, solo se cobraban las consumiciones de la barra. Lo único indispensable ayer en Tamarite para pasar un buen rato era llegarse hasta el Pabellón Municipal y llevar ganas de divertirse.
