Valoración de la jornada de huelga 8M en Monzón
Hace un año el movimiento feminista inició un nuevo proceso que nos ha llevado a la huelga del 8M. Desde nuestro Colectivo valoramos muy positivamente la implicación de asociaciones de mujeres de Monzón y de la Comarca del Cinca Medio en la organización de los actos reivindicativos del día 8, y la enorme participación de mujeres y hombres que con su presencia en la concentración, se estiman unas 1.500 personas, que se han sumado a las reivindicaciones por una sociedad más igualitaria.
El éxito previo conseguido por el movimiento feminista formado por mujeres diversas que han sido capaces de unirse, ha sido poner no sólo en la agenda social y política, sino también en los salones familiares, el debate del feminismo y crear una corriente de apoyo por la igualdad efectiva, por nuestros derechos y en contra de la violencia machista, como nunca se había vivido.
La capacidad de movilización del movimiento feminista se ha plasmado en multitudinarios actos: manifestaciones y concentraciones a lo largo del país. Es imposible no sentirse emocionado ante las imágenes de mujeres jóvenes y mayores luchando codo con codo. Y siendo esto importante, lo es también el camino que estamos realizando las mujeres para conseguir sociedades mejores, como lo ha hecho el movimiento feminista a lo largo de su historia.
Que el 8M es un punto y aparte en la lucha de los derechos de las mujeres es una realidad, al igual que el debate feminista ha cuestionado nuestro sistema socioeconómico, relaciones de pareja, familiares, laborales, políticas, pues la desigualdad afecta a todos los ámbitos.
Entramos en una nueva etapa, el día 8 hemos dicho que queremos ejercitar los derechos en condiciones de igualdad y el 9 de marzo no vamos a contentarnos con las
muestras de felicitación por el éxito conseguido, queremos la materialización de las transformaciones sociales que el feminismo ha reivindicado.
Queremos compromisos públicos en todos los ámbitos, municipal, autonómico, estatal; en el mundo laboral y en el educativo.
Queremos planes integrales de igualdad, y no apoyos puntuales, con leyes que los avalen y presupuestos que los sustenten.
Las protestas han llegado al corazón de la sociedad, a la cultura machista que impregna esa sociedad que cuestiona un movimiento feminista, del que forman parte nuevas
generaciones de mujeres, orgullosas, desinhibidasque exigen la igualdad ya.