Texto e Imagen: Jaume Garcia Castro
Binéfar, 7 de marzo, de 2014.- La sala de exposiciones del Ayuntamiento de Binéfar ha vuelto a abrir sus puertas para una exposición colectiva de pintura. En esta ocasión hay pinturas de catorce personas diferentes de todas las edades, cuyo nexo en común es que son alumnas de Gloria Jubero. Veinte años atrás, Gloria estaba preparando los decorados para una obra de teatro para niños y empezó a dar clases extraescolares de pintura para niños del colegio. A partir de esa experiencia y por su propia cuenta, empezó a dar clases a un reducido grupo de niños. Estuvo realizando estas clases durante unos años hasta que empezó a dar clases también a adultos. Hacía ya algunos años que había dejado las clases infantiles, pero este año ha vuelto con ellas, pero con una limitación: son a partir de los 10 años, porque realmente no le queda tiempo para más personas. Ahora se reúnen en su casa y Gloria no les enseña a pintar, sino que se reúnen para pintar todos juntos y Gloria se limita a ayudarles a expresar lo que llevan dentro, haciendo más el papel de coach o acompañante que el tradicional papel de maestra. Fruto de estas sesiones de pintura son las obras que componen la exposición “Sentimientos”.
No hay un perfil concreto de personas que acuden a estas reuniones pictóricas. Gloria nos comenta que hay personas de todas las edades y condiciones, hombres y mujeres cuyo único nexo en común es que suelen ser personas sensibles. «Hay más mujeres que hombres, como en todas estas actividades artísticas», nos confirma Gloria, «y tengo desde niñas de 10 años hasta una persona jubilada, de unos sesenta y siete años».
“Sentimientos” no es una exposición hecha pensando en el público. Recoge las obras individuales hechas por personas muy diversas entre sí, y son obras cuyo objetivo principal es el de avanzar en el dominio de las diferentes técnicas pictóricas y de dibujo, por lo que el espectador no debe esperar una obra puramente artística, sino que lo que va a ver son meros ejercicios estilísticos. Y es esa precisamente la gracia principal de la exposición. Son obras sencillas, sin pretensiones, donde la mano que pinta lo hace con completa libertad, buscando, encontrando, creando un estilo propio. Es esta búsqueda lo que más atrae al espectador habituado a las exhibiciones pictóricas, ya que los resultados obtenidos son frescos, naturales, alejados de los manierismos habituales. En ese sentido no se extrañe el espectador en ver ecos de las obras de Modigliani, Dalí u otros artistas conocidos, ya que se utilizan muchas veces obras de pintores famosos para trabajar a partir de ellas en los talleres de pintura.
El orden en el que se nos presentan las obras es tremendamente importante. Ya hemos comentado en otras ocasiones en exposiciones colectivas que, ante un grupo tan numeroso de artistas, es importante crear un ritmo en la exposición, conseguir que las obras no se molesten la una a la otra, sino que se complementen. Esta exposición es un buen ejemplo de una excelente creación de este ritmo que ordena obras de diferentes niveles de calidad, temáticas y técnicas y lo hace de tal forma que no se noten los altibajos. Y lo mejor de todo es que, sin ser una exposición de grandes artistas ni pretenderlo, hay algunas obras que tienen un enorme mérito, que llegan al alma del espectador, que trascienden la artesanía y se adentran en el terreno del arte.
Disfruten, pues, de la sensación de abandonarse por unos minutos, de ver una realidad a través de la obra de otras personas. Descubran otras sensibilidades, otras miradas y a otros artistas. “Sentimientos” se puede visitar este fin de semana, viernes y sábado por la tarde y domingo mañana y tarde.