La industria cárnica cumple con los requisitos sanitarios que exige el mercado japonés
La apertura de nuevos mercados se traduce en un aumento de la actividad productiva y, en consecuencia, del número de empleados Japón es uno de los principales destinos de ventas de carne de cerdo Binéfar,
Litera Meat inició diciembre con una capacidad de sacrificio que supera los 10.000 cerdos al día, cifras que significan una expedición diaria de más de 50 camiones con destino nacional e internacional. Aunque el salto cuantitativo está previsto para inicios de 2020, Litera Meat ha alcanzado importantes objetivos en apenas seis meses de actividad. Un recorrido en tiempo récord que ha sido posible gracias a la experiencia y dedicación que Grupo Pini ha invertido en la industria porcina durante cuatro décadas.
Recientemente Litera Meat ha recibido la autorización de Sanidad Agraria para exportar producto cárnico a Japón, un acuerdo muy importante que supondrá la apertura de nuevas posibilidades y un avance en la actividad de la planta, que cuenta con una sala especializada y equipada que garantiza todos los requisitos del país nipón. La carne de cerdo permite un sinfín de posibilidades gastronómicas, convirtiéndose en un producto gourmet y muy demandado por Japón, que desde hace meses ha mostrado su interés en la evolución de uno de los mataderos porcinos más relevantes de Europa.
Litera Meat ya cuenta con la aprobación de países como Hong Kong o Filipinas, además de un largo listado de destinos europeos como Francia, Italia, Portugal, Polonia o Eslovenia. Carlos Gaspar, Director de Calidad, Seguridad Alimentaria y Medio Ambiente, añade que “estamos muy satisfechos del trabajo realizado y seguimos inmersos en gestiones para ampliar nuevos horizontes como China, México o Canadá”.
Litera Meat persigue conquistar nuevos mercados exteriores, un reto muy exigente en el cual se trabaja diariamente. Calidad e innovación son son las claves para continuar la proyección de Litera Meat, que semanalmente registra nuevas cifras de crecimiento.
