El aviso se recibió directamente en el Puesto de Monzón, alertando de que había una persona pidiendo auxilio a gritos desde el interior de un domicilio
El pasado 24 de julio, se recibió una llamada telefónica en el Puesto de la Guardia Civil de Monzón, informando que desde el interior de un domicilio había una persona pidiendo auxilio a gritos.
Inmediatamente, los agentes de la Guardia Civil de Monzón que se encontraban en el acuartelamiento se dirigieron a la dirección facilitada, donde también acudió una patrulla de la policía Local de esa localidad. Lo primero que observaron fue a un varón tumbado en el suelo, el cual no podía articular palabra, ni se movía, teniendo uno de los Agentes que interactuar con él, para que se mantuviese despierto y no se desvaneciese.
Mientras otro de los Agente activó con toda celeridad a la central COS 062 de la Guardia Civil y a los servicios de emergencia, coordinando el aviso con la rapidez precisa para que estos acudiesen al lugar lo más inmediato posible, mientras se realizaban gestiones con el compañero de piso para recopilar toda información de la posible causa del desvanecimiento, indicando que se había encontrado a su compañero de piso en el suelo cuando llegó al domicilio y que padecía diabetes.
En el transcurso hasta la llegada de los servicios de emergencia, los Agentes trataron de mantener en todo momento despierta a la persona, reaccionando levemente ante las preguntas continuas, con la única intención de que se mantuviese consciente ante la posibilidad de entrar en un coma diabético.
Una vez en el lugar los servicios sanitarios, verificaron que tenía la glucosa en un nivel tan bajo que estaba a punto de entrar en un coma diabético, y que gracias a la intervención de los agentes habían conseguido mantenerlo estable hasta la llegada de los servicios de emergencia, siendo trasladado al Hospital de Barbastro.