. . . los ahorros per cápita de la humanidad se encuentran en el nivel más alto de la historia. Sin embargo, nuestros niveles de inversión (especialmente en lo que la humanidad necesita, como energías alternativas) son particularmente bajos. En los Estados Unidos, enormes sumas se acumulan en las cuentas de empresas y de particulares sin utilidad productiva, mientras que la gente sin buenos empleos está ahogada por las deudas. En China, unos ahorros cercanos a la mitad de todos los ingresos conviven con la mayor burbuja crediticia imaginable. Europa es aun peor: hay países con superávits comerciales gigantescos sin posibilidad de invertirlos en su territorio (Alemania y los Países Bajos), países con déficits y sin capacidad para invertir en perentorias necesidades de mano de obra y capital (Italia, España, Grecia) y una zona euro incapaz de mediar entre ambos tipos de países porque carece de las instituciones de tipo federal que podrían hacerlo.
. . . nuestros problemas son globales. Como el cambio climático, requieren acción local pero también un nivel de cooperación internacional desconocido desde Bretton Woods. Ni Norteamérica, ni Europa, ni China pueden resolverlos de manera aislada; ni siquiera mediante acuerdos comerciales. Nada por debajo de un nuevo Bretton Woods puede lidiar con la injusticia tributaria, la escasez de buenos empleos, el estancamiento salarial, la deuda pública y la de las familias, la baja inversión en cosas que necesitamos desesperadamente, el gasto excesivo en cosas perjudiciales, el aumento de la depravación en un mundo inundado de efectivo, los robots que marginan a una parte cada vez mayor de nuestras fuerzas de trabajo, la educación prohibitivamente costosa que se necesita para competir con los robots, etc. Las soluciones nacionales, amañadas bajo el mantra de «recuperar nuestro país» tras fronteras reforzadas, solo pueden traer más descontento, ya que permitirán a nuestros oligarcas-sin-fronteras forjar acuerdos comerciales que abocarán a la miseria a la mayoría mientras ellos ponen a salvo su botín en paraísos fiscales.
Yanis Varoufakis: «Globalization is stuck in a trap. What will it be when it breaks free?», en theglobeandmail.com ; Toronto : The Globe and Mail, 12 enero 2018 (extr. y trad. La Litera información)