Las dos poblaciones literanas forman parte de los 51 municipios de menos de 2.000 habitantes de la provincia de Huesca, que han solicitado ayudas de la DPH para la campaña “Fomento y digitalización – Plan Seguridad Rural» para instalar cámaras de videovigilancia en sus pueblos.
La Diputación Provincial de Huesca está apostando de forma decidida por acciones que mejoren la seguridad en nuestro territorio ya que la protección y la estabilidad son premisas fundamentales para mantener un medio rural vivo y con negocios activos. Por eso, la institución provincial ha puesto en marcha este nuevo Plan de Seguridad Rural, dotado con 100.000 euros, y que permite emplear las nuevas tecnologías y herramientas digitales, como son los sistemas de videovigilancia, para combatir la inseguridad en el territorio.
Gracias a esa subvención, los ayuntamientos pueden incorporar como gastos la adquisición, instalación y puesta en servicio de un sistema de videocámaras en uno o varios puntos de acceso al municipio.
Pero este no es el único Plan de la DPH destinado a mejorar la seguridad en el provincia. Cabe recordar que este año se ha incrementado de 100.000 a 173.000 euros la partida del Plan de Reparación y Reforma de cuarteles de la Guardia Civil y que, este mes de octubre, quedaba aprobado en pleno otro Plan para mejorar los equipamientos de los diez cuerpos de policía local con los que cuenta la provincia de Huesca.
Se trata de la primera vez en la historia de la Diputación que se abre una línea de ayudas, dotada con casi 70.000, para este cuerpo policial. De esta forma, los ayuntamientos de Huesca, Monzón, Barbastro, Fraga, Jaca, Binéfar, Sabiñánigo, Graus, Benasque y Sallent de Gállego van a poder asumir nuevas inversiones en equipamientos como vehículos, reforma de instalaciones o material policial.